Aplicaciones Digitales
Crear aplicaciones digitales implica un proceso multifacético que va más allá de simplemente escribir código. Involucra el diseño, desarrollo, pruebas y distribución de una solución digital que funcione en diferentes dispositivos y plataformas, como smartphones, tabletas, computadoras de escritorio y otros dispositivos conectados. Este proceso no solo abarca la creación de aplicaciones móviles, sino también aplicaciones web o de escritorio, cada una con sus propias consideraciones y requerimientos técnicos.





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Idea y Conceptualización:
Identificar un problema o necesidad que la aplicación resolverá.
Definir el propósito y el público objetivo de la app.
Investigar el mercado para validar la idea y conocer a los competidores.
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Planificación y Diseño:
Definir las funcionalidades clave de la app.
Diseñar la experiencia de usuario (UX) y la interfaz de usuario (UI), creando wireframes o prototipos.
Establecer la tecnología y plataforma en la que se desarrollará (iOS, Android, web, etc.).
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Desarrollo:
Desarrollar el backend (servidores, bases de datos) si es necesario.
Desarrollar el frontend (interfaz gráfica y funcionalidad de la app).
Integrar servicios adicionales como pagos, redes sociales, etc.
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Lanzamiento:
Publicar la app en las plataformas correspondientes (Google Play, App Store, o en la web).
Promocionar la app mediante campañas de marketing, SEO y redes sociales.
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Probar la app para detectar errores y garantizar que todas las funcionalidades funcionen correctamente.
Realizar pruebas de usabilidad para asegurar una experiencia de usuario fluida